Durante nuestros largos trayectos por Sudán, casi una decena de veces tuvimos que reparar el remolque que arrastraba el camión Unimog grande.

Este transporte de carga era del ejército pero no estaba preparado para soportar tanto peso.

En él llevábamos 2000 L. de diesel, 1000 L. de agua, herramientas y piezas de repuesto. El exceso de Kilos provocaba que el enganche del remolque al vehículo partiera con frecuencia.

Cuando esto ocurría, Antonio (mi padre) se pasaba horas soldando el enganche para repararlo y esto nos retrasaba uno o dos días según la gravedad de la rotura.

Recuerdo una de las veces que partió el enganche durante un largo trayecto por el centro de Sudán.

El camión grande tenía tanta fuerza que cuando perdía el remolque mi padre continuaba su camino sin percatarse de lo ocurrido.

Al ver el desastre, mi madre y yo le seguimos unos 5km.con el Unimog pequeño, tocando y tocando el clacson para que nos pudiera oir y se detuviera...